El mundo del espectáculo está de luto. Este 28 de noviembre de 2024, México despidió a Silvia Pinal, la última diva del Cine de Oro, quien falleció a los 93 años tras enfrentar complicaciones de salud. Su partida marca el cierre de una era para el cine, el teatro y la televisión mexicana, dejando un legado artístico que perdurará por generaciones.
Una vida dedicada al arte
Nacida el 12 de septiembre de 1931 en Guaymas, Sonora, Silvia Verónica Pinal Hidalgo mostró desde temprana edad su talento innato para las artes. Inició su carrera en novelas radiofónicas y pronto conquistó el cine junto a figuras emblemáticas como Pedro Infante y Germán Valdés “Tin-Tan”. Su primera gran cinta, Un extraño en la escalera (1954), fue solo el inicio de una prolífica trayectoria con más de 90 películas, entre ellas la trilogía dirigida por Luis Buñuel: Viridiana (1961), El ángel exterminador (1962) y Simón del desierto (1965), que la catapultaron al reconocimiento internacional.
En el teatro, Pinal fue pionera de los musicales en México, destacándose en producciones como Mame y Hello, Dolly!, y como productora de grandes montajes como Cats y La jaula de las locas. En televisión, su programa Mujer, casos de la vida real se convirtió en un referente por abordar temas sociales durante más de dos décadas.
Ícono de fortaleza y reinvención
La vida de Silvia Pinal estuvo marcada por grandes éxitos, pero también por adversidades. Desde su infancia, cuando descubrió que su padre biológico no la había reconocido, hasta la trágica pérdida de su hija Viridiana en 1982, la actriz demostró una resiliencia que la definió tanto en lo personal como en lo profesional.
Se casó en cuatro ocasiones, destacando su unión con el empresario Gustavo Alatriste y el cantante Enrique Guzmán, con quienes tuvo a sus hijos Viridiana, Alejandra y Luis Enrique. Además, construyó una dinastía artística que abarca cuatro generaciones, incluyendo a su nieta Stephanie Salas y a su bisnieta Michelle Salas.
Un legado eterno
Condecorada con múltiples premios, entre ellos cuatro Arieles y el Ariel de Oro, Silvia Pinal es recordada no solo por su talento, sino por su valentía al romper tabúes y desafiar los estándares de su época. Fue musa de artistas como Diego Rivera y protagonista de escándalos y censuras que jamás opacaron su brillo.
Su última aparición pública en 2022 mostró a una mujer apasionada por su trabajo, quien hasta en silla de ruedas mantenía el espíritu que la convirtió en una de las figuras más queridas y admiradas de México.
El adiós a una leyenda
Silvia Pinal no solo fue actriz, sino un símbolo del arte y la cultura que ayudó a construir la identidad de México a nivel internacional. Hoy, el mundo del entretenimiento despide a una leyenda, pero su luz sigue brillando a través de sus películas, obras de teatro y en el corazón de quienes crecieron admirándola.
Descanse en paz, Silvia Pinal, una de las últimas divas del Cine de Oro mexicano.